Si ejerces tu actividad profesional por cuenta propia debes conocer el régimen de fiscalidad que debes seguir: los Impuestos de los autónomos.
Uno de los temas fundamentales antes de tomar la decisión de ejercer una actividad profesional por cuenta propia es conocer los impuestos de los autónomos. ¿Qué impuestos les corresponde pagar a los profesionales autónomos?, ¿cada cuánto deben hacerlo?, entre otras preguntas que intentaremos aclarar en este artículo.
Lo primero que debes saber es que casi lo más importante al hacerte autónomo (y lo que de hecho marca el inicio de tu actividad profesional por cuenta propia) es darte de alta como profesional autónomo ante Hacienda. Una vez que te has dado de alta, hay constancia del funcionamiento de tu actividad y puedes comenzar a registrar tus gastos e ingresos.
A diferencia de las empresas, los profesionales autónomos se enfrentan solos a sus responsabilidades tributarias. El autónomo debe llevar el registro de su actividad de facturación y pagar puntualmente los impuestos.
En general, hay dos impuestos que deben pagar los autónomos:
- El impuesto sobre el valor añadido (IVA); y,
- El impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF).
Vamos con cada uno:
- El IVA es el Impuesto que recae solo sobre el consumidor final. En ese sentido, como autónomo, funciona de forma similar a como ocurre en las empresas: autónomos y empresas son intermediarias pero, eso sí, los autónomos deben liquidar este impuesto cada final de trimestre. Esto es: devolver el IVA que se haya cobrado por productos o servicios cobrados y recibir el IVA que se haya pagado en las facturas. La diferencia entre el IVA recibido y el IVA pagado es lo que debe abonarse a Hacienda al final de cada trimestre, dentro de los lapsos establecidos. Te contamos aquí los gastos deducibles para autónomos que trabajan desde casa.
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El IRPF es el que graba la renta de las personas (el que nos toca registrar a todos, incluidos los autónomos). Como sabes, cada año Hacienda te cobrará impuestos por los beneficios recibidos y debes cumplir rigurosamente con esta responsabilidad tributaria. Este impuesto normalmente se va reteniendo en las facturas emitidas a lo largo del año fiscal. Al final del año, cuando hagas tu declaración de la Renta, en función del beneficio que tengas, Hacienda te devolverá una parte o te tocará pagar un poco más. Mira nuestro artículo sobre cómo prepararte para la declaración de la Renta.
Como ves, a nivel de impuestos, no es tan diferente el sistema fiscal. Eso sí, debes tener en cuenta que como autónomo, eres el único responsable de cumplir cabalmente con estas responsabilidades (y quien deberá asumir el 100% de las consecuencias); y, saber además, que también, bajo esta figura jurídica, debes hacerte cargo de las contribuciones a tu régimen de Seguridad Social.
Revisa también los Deberes y Derechos de los autónomos; así como las razones para contratar una asesoría especializada para empresas y autónomos.
Para que puedas dedicarte completamente a tu negocio, lo mejor -y para evitar errores- es delegar tus responsabilidades tributarias a una asesoría para empresas con experiencia como la nuestra. Contáctanos y te ayudamos.