¿Por qué emprender?

¿Por qué emprender?

Tener un negocio propio, más que un sueño, puede ser una realidad tangible traducida en seguridad y prosperidad. Razones para emprender hay muchas… Os contamos por qué emprender:

Tener un negocio propio a veces suena lejano y excesivamente complicado. En el contexto de hoy, el mercado da para todo y, aunque el nivel de competencia es alto, sigue habiendo espacio para nuevos emprendimientos. Como decimos popularmente, ¨hay para todos los gustos¨.

Como alternativa al desempleo, el gobierno español ha lanzado los últimos años una serie de planes e iniciativas de apoyo a emprendedores. Ser un emprendedor suena a veces como algo inalcanzable, pero, en realidad, un emprendedor es un soñador: un apasionado de lo que hace, motivado por nuevas metas y sueños que, muchas veces, trascienden las fronteras de un empleo.

El trabajo dignifica siempre pero emprender siempre es una posibilidad para quienes no están contentos del todo con su empleo, necesitan un trabajo que les permita distribuir de una forma más libre su tiempo, no suelen llevarse bien con las jerarquías y la autoridad; o, también, son ya expertos en su área y sienten la necesidad de crear algo propio, quieren generar nuevos ingresos, o simplemente tienen el sueño de dedicarse a algo distinto y vivir la experiencia.

Muchas personas se levantan a diario, cumplen con la rutina, van a sus trabajos y al sentarse en su escritorio se recuerdan a sí mismos que algún día no estarán más allí, que algún día serán el jefe y dejarán la relación de dependencia por la libertad que ofrece la empresa propia.

¿Por qué?

  • Estilo propio: No tener que apegarse más a la vestimenta o la cultura corporativa, es más, crear una nueva y alternativa; fijar formas de trabajo nuevas acordes a los gustos y conocimientos; diseñar un nuevo logo, escoger un nombre, decorar la oficina o el local… no hay límites en la empresa propia.
  • Libertad: Disponer de horarios propios y planificar vacaciones libremente son cosas que un empleo regular no ofrece frecuentemente.
  • Proyecto de vida: Trabajar independientemente permite planificar y proyectar la vida de acuerdo a los intereses, sueños y metas particulares geográfica y temporalmente. Permite escoger la zona y el momento, el tiempo dedicado a la familia, los amigos y las actividades recreativas. En el caso de las mujeres, permite una planificación familiar más libre que a la que están generalmente sujetas en el mundo corporativo.
  • Experiencia: el desarrollo y el crecimiento laboral se realizará de acuerdo a los intereses particulares, gustos, deseos y sueños; con la ventaja de acumular la experiencia del manejo de un negocio propio, orientar el rumbo, y dirigir la formación necesaria.
  • Independencia económica: a pesar de la gran responsabilidad que implica, también puede ser positiva. Si bien trabajando en una empresa se percibe un sueldo fijo sin sobresaltos, también es cierto que en un negocio bien planificado se podría obtener una retribución mayor que permite crecer económicamente y disfrutar de las ganancias directamente.
  • Toma de decisiones: sin tener que discutir con jefes o gerentes con visiones distintas, tomar todas las decisiones puede ser una gran responsabilidad, pero también una experiencia muy rica e interesante. Las decisiones tendrán también gran influencia en nuevas personas: clientes, suscriptores o un nuevo equipo de trabajo.
  • Satisfacción garantizada: tenga o no el éxito esperado el emprendimiento, siempre resulta satisfactorio haber creado algo propio de la nada y haber disfrutado de un tiempo de independencia.
  • ¡¿Por qué no?!

 

La realización del proyecto en sí mismo es generalmente la mayor satisfacción de un emprendedor; por encima de los frutos económicos tangibles. La marca, la oficina, el local… se vuelven parte del individuo y su experiencia de vida, no sólo laboral.

La sensación de ir a trabajar cambia radicalmente cuando ya no se trata de sumar un esfuerzo más; sino que se trata de ser –en sí mismo- el motor que mueve el futuro personal. Trabajar para sí mismo y para la familia es una motivación. Todo depende de ese hecho y lograrlo es una gran satisfacción personal.

La diferencia entre el empleado y el emprendedor está en buscar o dar trabajo, y tiene una gran cantidad de implicaciones legales y tributarias. Nuestro equipo de Advans Asesores se encarga de que vosotros solo tengáis que vivir el sueño y poner en marcha el negocio.

Si queréis crear una nueva empresa, podéis contactar con nuestros Asesores aquí. Ellos se encargarán de todos los trámites.

Para hablar más sobre emprendimiento, estamos en Twitter: @_Advans.